Año 16, Número 213.

Mi jornada es un absurdo sinsentido

Yo espero del pobre una limosna,

Y doy al rico generosamente.

Ensarto un rayo en la aguja

Confío mi llave a un bandolero

Y pinto de blanco mis mejillas.

El pobre no me da su pan,

El rico no acepta mi dinero,

En la aguja no entra el rayo.

Entra sin llave el bandolero,

Y la tonta llora a cántaros— Sobre su jornada de sinsentidos.

Sembrador a la puesta de sol – Vincent Van Gogh

Marina Ivánovna

Marina Ivánovna Tsvetaeva nació en Moscú, Rusia, el 8 de octubre de 1892. Fue poeta y escritora, considerada como una de las autoras más notables de la literatura rusa del siglo XX.

En oposición a los ideales de su madre, que esperaba que Marina fuera pianista, la autora estudió Historia de la literatura en la Sorbona, dos años después, en 1910, autopublicó su primer libro.

Dentro de su obra poética se encuentra Álbum vespertino (1910), Viorsti (1922), El poema de la montaña (1924-1925), Poema del fin (1925), Carta de año nuevo (1926-1927); como parte de su prosa destacan dos primeras partes de una trilogía dramática consagrada a la figura de Teseo: Ariadna (1923) y Fedra (1924).

Tsvetaeva falleció el 2 de septiembre de 1941.