Año 13, número 151.

 Un mundo como un árbol desgajado.
Una generación desarraigada.
Unos hombres sin más destino que
apuntalar las ruinas.

Romper el mar
en el mar, como un himen inmenso,
mecen los árboles el silencio verde,
las estrellas crepitan, yo las oigo.

Sólo el hombre está solo. Es que se sabe
vivo y mortal. Es que se siente huir
—ese río del tiempo hacia la muerte—.

Es que quiere quedar. Seguir siguiendo,
subir, a contramuerte, hasta lo eterno.
Le da miedo mirar. Cierra los ojos
para dormir el sueño de los vivos.

Pero la muerte, desde dentro, ve.
Pero la muerte, desde dentro, vela.
Pero la muerte, desde dentro, mata.

... El mar —la mar—, como un himen inmenso,
los árboles moviendo el verde aire,
la nieve en llamas de la luz en vilo...
 
Blas de otero
Foto: Pixabay

El 15 de marzo es el 104 aniversario del poeta español Blas de Otero, uno de los principales representantes de la poesía social e intimista de los años cincuenta en su país.

            Su obra inicial estuvo fuertemente marcada por el existencialismo, debido a su reclusión en un sanatorio por una crisis depresiva. También se ve en su obra lo religioso y, por supuesto, lo social.

            Entre las ditinciones que se le concedieron están los premios Boscán, el Fastenrath y el Casa de las Américas. En su vasta obra literaria están Ancia, Redoble de conciencia, Pido la paz y la palabra, En castellano y Que trata de España.