Año 14, número 173.
El aumento de la obesidad en la población y el tratamiento a distancia han sido los principales retos de los nutriólogos durante la pandemia por COVID-19
Unidad de Difusión CUSur
Durante el confinamiento por COVID-19, la nutrición se ha visto afectada tanto de manera directa con la población como en el ámbito educativo-formativo de los profesionales de la salud. En el Centro Universitario del Sur, la Licenciatura en Nutrición aborda el estudio desde cuatro áreas principales: la nutrición clínica, la comunitaria o poblacional, los servicios de alimentos y las ciencias de los alimentos. De acuerdo con la maestra Patricia Curiel Curiel, Coordinadora de la Licenciatura en Nutrición del CUSur, la nutrición clínica y la poblacional han sido las que más cambios han tenido.
La telenutrición ha ido en aumento en el ámbito profesional clínico, “se ha presentado dificultad del trato presencial, pues las restricciones de distancia impiden el contacto directo con los pacientes; se han tenido que adaptar para cumplir con los tratamientos, lo que ha beneficiado el auge de la telenutrición: la consulta del paciente a distancia. Es importante incorporar el uso de las tecnologías como herramienta para la profesión del nutriólogo en el plan educativo, pues estos cambios llegaron para quedarse”.
En cuanto a la nutrición poblacional, ha habido un incremento de la obesidad por el sedentarismo, los trabajos desde casa y las restricciones para salir. “El estilo de vida ha estado cambiando en comparación con el 2019. También aumenta la obesidad por los cambios emocionales que puede traer el confinamiento, y que llevan a una mayor ingesta de alimentos altos en grasa, en azúcares y sal, que no son correctos para una buena nutrición”, dijo Curiel Curiel.
En el ámbito de la salud mental durante el confinamiento, la nutrición juega un papel fundamental para el bienestar en general, por lo que “se han dado pasos para impartir la materia Vida saludable en educación básica, pues la alimentación es un proceso en el que todos participamos pero sí necesitamos una asesoría nutricional desde etapas tempranas, ya que estamos expuestos a un mundo donde tenemos muchos productos que quizá no sean los más adecuados para consumir o no los consumimos en las cantidades en las que deberíamos hacerlo”.
A finales de 2020 comenzó en México el nuevo etiquetado de los productos que contienen exceso de calorías, azúcares, sodio, grasas saturadas y grasas trans, así como la recomendación para que los niños no consuman aquellos productos que contienen edulcorantes y cafeína. “Este etiquetado tiene una base científica, tomando en cuenta las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre la alimentación y nutrición apropiadas para la población mexicana, en comparación con el etiquetado anterior, basado más en la industria que en la ciencia”. Este etiquetado contiene mensajes que la población pueda entender fácilmente “no sólo de la información sobre las cantidades que contiene el producto, sino sobre lo conveniente que es para nosotros consumirlo y el impacto que podría tener en nuestra salud”.
Hasta el segundo semestre de 2020, la Licenciatura en Nutrición del CUSur contaba con 483 estudiantes activos, quienes, como la gran mayoría de los estudiantes, se han esforzado por continuar sus estudios de manera virtual. “A ellos y a todos los profesores nutriólogos envío una felicitación y un reconocimiento por su labor, aun en las circunstancias del confinamiento”, concluyó Patricia Curiel Curiel.