Año 13, número 155.
20 poemas para construir una casa, de Alejandro von Düben, es un libro de poesía infantil perfecto para leer en casa durante el confinamiento por Covid-19
Livier Jaqueline García López
Se podría pensar que la poesía es un asunto de almas adultas, almas que buscan un reflejo en experiencias ajenas para apoderarse de ellas. También se podría pensar que la poesía es un lenguaje que sólo los grandes entienden, un conjunto de acertijos metafóricos que sólo pueden resolver unos cuantos, o un mundo que se atreven a explorar sólo los mayores.
El escritor Alejandro von Düben, en su obra 20 poemas para construir una casa, manifiesta que la poesía es algo más que un ejercicio difícil de resolver, se trata más bien de un paseo por casa para chicos y grandes, una caminata entre los pasillos y la sala, entre la cocina y la habitación; entre un conjunto de muebles que tienen su propia historia, albergados en una casa construida con poesía, un paseo a los días de atrás, pero también a los que se avecinan, un paseo para una generación indistinta en una casa que acarrea para algunos la nostalgia y para otros el porvenir.
A nuestro paso podemos encontrarnos con la televisión, que sufre distintos estados de ánimo; unos días apagada y otros encendida y a la que hay que mirar con atención para percatarse cómo se encuentra el día de hoy. O con un excusado que se queja de los malos tratos, pues no debe ser fácil soportar un sinfín de olores en un sólo día, y que aunque sus quejas sean en un idioma desconocido, podemos imaginar qué es aquello que tanto le molesta.
Nos encontramos también con una ventana que continúa con su labor a pesar de sufrir ceguera, permitiendo que la casa se inunde con los rayos del amanecer; la luz de casa que suele tomar vacaciones sin despedirse, pero que siempre vuelve con mayor resplandor. Roperos que buscan saciar su vacío con diversas prendas en el interior; una cama cuyo pasatiempo favorito es dormir y que se molesta cuando alguien perturba su sueño; aquellas puertas que esconden mundos misteriosos a punto de ser descubiertos, o la habitación que se vuelve un refugio para el aburrimiento, y que al paso de los años parece volverse más pequeña.
Irma Bastida Herrera, la ilustradora, es quien materializa la poesía de von Düben y a todos los habitantes de esta casa, que entre paisajes coloridos nos llevan a distintas realidades, como el espejo en el que, al mirarnos, nos cuenta una historia en la que siempre somos protagonistas, o el refrigerador, que puede ser un buen escondite cuando el calor del verano toca la puerta.
20 Poemas para construir una casa invita a los niños a reconocerse en la poesía y a los grandes a dar un retorno a la niñez, en donde la imaginación nos lleva a encontrar lo extraordinario en cosas y espacios aparentemente comunes con historias por contar, pero sobre todo nos invita a construir nuestra propia casa, tomando en cuenta que lo único que se necesita para ello es la poesía.
Alejandro von Düben nació en Chapala, Jalisco el 5 de julio de 1988, es licenciado en Letras Hispánicas por la Universidad de Guadalajara y ganador de los Juegos Florales de Zapotlán el Grande, Jalisco en el 2014; acreedor del Premio Nacional de Poesía Francisco González León en 2015 y ganador del Concurso de Cuento Alfredo Velasco Cisneros en el mismo año. Obtuvo el Premio Internacional de Poesía Infantil FOEM en el año 2017. A lo largo de su carrera literaria ha publicado Dar a luz, Los poemas de la noche insomne y 20 poemas para construir una casa, este último liberado para su descarga electrónica:
livier.jaqueline@gmail.com
