Año 14, Número 184.
Mi corazón es angustia, y lágrimas caen de mis ojos;
Hace largo, largo tiempo que la alegría me es extraña:
Olvidado y sin amigos soporto mil montañas,
Sin una voz dulce que suene en mis oídos.
Amarte es mi placer, y profundo lastima tu encanto;
Amarte es mi desdicha, y esta pena lo ha demostrado;
Pero el corazón herido que ahora sangra en mi pecho
Se siente como un flujo incansable que pronto será deshecho.
Oh, si yo fuese —si acariciar la felicidad yo pudiese—
Abajo en el arroyo joven, en el cansado castillo verde;
Pues allí deambula entre melodías permanentes
Aquella lágrima seca de tus ojos.
Robert Burns
Robert Burns nació el 25 de enero de 1759 en Alloway, Escocia. Desde corta edad comenzó a escribir sus primeros poemas; éstos comenzaron a ser reconocidos hasta sus 27 años. Con su colección de poemas escritos en dialecto escocés causó impacto en la élite literaria de Edimburgo, de la que tiempo después formó parte.
Es considerado el pionero del movimiento romántico. Su poema Auld Lang Syne se canta en países angloparlantes como himno de despedida.
Burns nunca olvidó sus raíces a pesar de la fama. Durante su vida se dedicó a trabajar en los problemas que afectaban el entorno al que pertenecía y destacaba la igualdad social. Falleció el 21 de julio de 1796 a la edad de 37 años, pero sus poemas se disfrutan y recitan hasta la fecha.