Año 16, Número 227.

Último día de invierno

Hoy murió la abuela. 

Mañana brotarán flores del jardín.

Al final de la habitación mamá llora. 

Llora tan profundamente que jamás dejará de llorar. 

Está sosteniendo su cara con las palmas de las manos. 

Su pecho muerde y traga con velocidad el aire. 

El peso hace caer su cabello castaño.

Del otro lado del cristal está el cuerpo de la abuela 

a quien nunca vi llorando.

Alrededor flores en agua que aún se ven vivas 

fueron cortadas de tajo esta mañana. 

Primer día de primavera

Aún no brotan flores del jardín.

Es el quinto cumpleaños de mi hija. 

La tristeza de ayer y de todos los días anteriores 

se mezcla con la luz que filtra el aire de la casa.

Las casi plantas en su brotar secreto. 

Una brisa tibia baja del cielo 

sacudiendo el cabello castaño de mi hija.

Por fuera de la casa

hay fiesta en el pueblo. 

Se lanzan cuetes y retumba la procesión. 

Adentro de la casa

El tiempo masticando las cosas por encima

la edad convirtiéndose en polvo y ceniza.

Segunda semana de verano

No ha dejado de llover. 

Mamá y sus hermanas hablan 

en torno a la botella de ponche. 

Esperan que el abuelo llegue del taller.

En silencio todas extrañan a la misma persona. 

Después de dos días de lluvia

el agua es tan pesada que sube de abajo hacia arriba.

Las casas parecen más pequeñas y los tejados más largos.

Un transeúnte se esconde en nuestra cochera. 

Pronto se le une alguien más. 

Se sacuden el agua

Se reconocen

Se acercan para hablar despacio

más cercanos al oído. 

La lluvia se calma.

Se despiden con un abrazo.

Al minuto de irse la lluvia vuelve a arreciar.

Algún día de octubre

Sin darme cuenta ha dejado de llover.

Estaba tan acostumbrada al sonido del agua 

entre los miles de caudales miniatura.

Nadie me dijo cómo se extrañaba todo eso.

Mi madre ha dejado de llorar. 

Cuando pienso en ella 

la recuerdo sentada en el patio 

con la mirada puesta en el arrayán

como si lo viera absorber la luz. 

El viento arrancó una hoja del árbol más bajo.

La tierra transformó esa hoja en la vida que empuja los brotes 

de las flores nuevas del jardín.

Primer día de invierno

El abuelo acaba de morir.

José Emmanuel Navarro

Nenúfares
– Claude Monet

«Flores del jardín» de José Emmanuel Navarro fue el poema ganador del X Concurso Literario CUSur, modalidad poesía. El jurado del concurso, constituido por los escritores Adriana Dorantes, Armando Salgado y Silvia Madero, destacó al poema por:
«Ser un poema claro y concreto, que mantiene la tensión en sus páginas. Es un texto íntimo que invita a que el lector se adentre en su propio álbum familiar. El cierre del poema es sorpresivo».

José Emanuel Navarro es estudiante de la licenciatura en Letras Hispánicas del CUSur. Fue mención honorífica en este concurso y modalidad en el año 2020 y 2021. Ha publicado en los medios Tzaulan y La gaceta del CUSur. Fue conferencista en el EIELLZ en el 2018.  Su cuento «Tiempo extra» fue antologado como uno de los finalistas en el concurso del Festival Rulfiano de las Artes.

Fue primero, tercero y segundo lugar en tres años diferentes en el Concurso Panteón Literario del CUSur. Fue antologado en Indicios, atisbos de la literatura actual del Sur de Jalisco. Es miembro y fundador de la banda de rock conceptual Los Romies.